Uno nunca termina de crecer y de aprender, de eso estoy segura, pero hay circunstancias en la vida que te hacen madurar y sin duda la maternidad es una de ellas. El 12 de Agosto del año pasado (2004), cambió mi vida, supe que iba a ser mamá; puede sonar cursi la frase, pero realmente es así. Desde ese día dejé de fumar, de tomar copete ( alcohol para decirlo más refinadamente), de carretear hasta el amanecer y a privarme de muchas cosas que hasta ese momento eran parte de mi vida. Ahora me doy cuenta cómo el ser madre te hace madurar. A mi me llegó quizás muy tarde, otros maduran de otras manera, otros no maduran nunca; todos tenemos personalidades distintas...Ahora me doy cuenta que a mis 32 años no tengo nada. Me refiero a cosas que no me interesaban hasta ahora, como independizarme de mis padres, tener la soñada "casa propia", ahorrar, tener imposiciones para cuando jubile, un auto, etc. Cosas con las que soñaba pero que no hice nada por obtenerlas realmente. Quizás por ser hija única me relajé al tener muchas de esas cosas que necesitaba, no todo tampoco, pero he vivido cómodamente sin preocuparme mucho por el futuro. Ahora quiero abrir una libreta de ahorro para la vivienda, nunca es demasiado tarde. Cómo nos cambia la vida! Por cierto ahora casi ni carreteo y no quiero volver a fumar...Claro que tampoco tan fanática, me tomo mis copetitos también y alguna cosita ha salido por ahí, pero ya no es lo mismo que antes. En esencia sigo siendo la misma, pero sin duda -ahora viene otra frase cursi- he subido un peldaño en la larga escalera de la vida...aunque ya era hora
Nota:Si me quieren invitar a algún carrete no duden en hacerlo, después de todo he madurado, pero no hay que exagerar, todos los excesos son malos...